La Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de Estados Unidos intentaba volver a la vieja normalidad -o la normalidad prepándemica- con la 94 edición de los Premios Oscar. Pruebas Covid mediante, la ceremonia volvía a contar con una amplia audiencia, muchos invitados y todo ello sin la presencia de una mascarilla. En cambio, este gran evento del cine a nivel mundial se ha visto ensombrecido por un desagradable acontecimiento protagonizado por Will Smith, que durante la gala abandonaba su asiente no solo para recoger una estatuilla, sino también para abofetear a Chris Rock, cómico que en ese momento presentaba la gala y que acaba de hacer un chiste sobre la alopecia de Jada Pinkett Smith.
Pero para los amantes de la moda el primer bofetón se produjo mucho antes, concretamente durante la alfombra roja de los propios premios, que se quedó muy lejos de recuperar el glamour que tanto la caracterizó hace años -incluso mucho antes de la pandemia-. Las invitadas, pese a que apostaron por grandes marcas de la industria, todas se quedaron un poco descafeinadas dejando looks aceptables, pero poco reseñables y que no constarán tampoco en los libros de historia.
Por ello, elegir entre los mejores looks se hacen sencillo y difícil a partes iguales.
Penélope Cruz de Chanel
Quien sabe si es el amor u orgullo patrio lo que nos hace incluir siempre -o casi- a Penélope Cruz entre los mejores looks de las ceremonias. Puede que también ayude su apuesta fija por Chanel, maison francesa de la que es imagen, y que pese a la sobriedad que al caracteriza, el buen hacer está abalado por años de historia de la marca y es un valor seguro para cualquier alfombra roja.
Uma Thurman de Bottega Veneta
Pese al debut de Matthieu Blazy para Bottega Veneta hace apenas unas semanas, sus comentados looks todavía no han llegado a la alfombra roja, aunque sí la firma. Por ella apostó Uma Thurman, aunque también con un sencillo binomio blanco y negro en forma de blusa satinada con un falda columna que acataba las normas del protocolo y aportaba todavía más sobriedad a la noche.
Zoë Kravitz de Saint Laurent
También Zoë Kravitz cayó en la sencillez para la noche del cine, aunque con una imagen más dulcificada si cabe de su estilismo, empolvando el vestido de Saint Laurent en color rosa y acompañado por un beaty look con un flequillo al más puro estilo Audrey Hepburn.
Maggie Gyllenhaal de Schiaparelli
Maggie Gyllenhaal ha sido, quizá, de las más llamativas de la noche por apostar siempre por el 'transgresor' Schiaparelli, aunque en su justa medida. La actriz apostó por un vestido palabra de honor exagerado con los característicos detalles en color dorado que tanto han gustado de sus últimas colecciones.
Zendaya de Valentino
Valentino es a Zendaya lo que Chanel a Penélope Cruz. La actriz -y sobre todo su estilista- han hecho un tándem siempre ganador en cada alfombra roja, aunque esta vez también apostando por la sobriedad. Si en la pasada edición Zendaya sorprendía con un vestido vaporoso en amarillo neón, esta ocasión todo el protagonismo se lo llevaba la falda con cola confeccionada en lentejuelas doradas combinada con un top efecto blusa satinada.
Nicole Kidman de Armani Privé
Fue la sencillez del resto lo que hizo casualmente destacar a Nicole Kidman y su Armani Privé. La ausencia de color hizo que este gris metalizado fuese hasta rompedor, ayudado pro los volúmenes de vestido en la cadera y los picos del palabra de honor, que aportaban más dramatismo.
Alana Haim de Gucci
Y de gris, a gris perla. Ese fue el escogido por Alana Haim para su vestido de Gucci con efecto escamas que, sin duda, destacó como uno de los más originales y que confirma que la piel de anfibio es uno de los estampados del momento.
Kourtney Kardashian de Mugler
Esta gala ha supuesto el debut de Kourtney Kardashian, cuya nueva vida la ha convertido en una celebridad de primera línea como el resto de sus hermanas -menos Khloé, por el momento-. Para ello, la empresaria escogió un look sencillo en su ya omnipresente negro, pero esta vez en un elegante vestido firmado por Mugler, uno de los diseñadores fetiches de su hermana Kim hasta que inició su era Balenciaga.
Kodi Smit McPhee de Fendi
Una gala más, la espectacularidad tampoco llegó a los hombres salvo raras excepciones. Como fue Kodi Smit McPhee, que escogió un traje a medida de Fendi en color azul celeste conjuntado con una botas en color blanco efecto red.
Jessica Chastain de Gucci
La actriz Jessica Chastain se vistió para ganar. Y así fue. Enfundada en un vestido encorsetado de Gucci confeccionado a base de lentejuelas en dos colores: rosa y bronce, como la propia estatuilla, resaltadas por el vuelo de la falda rematada en volantes.
Billie Eilish de Gucci
Y por último, que no menos importante, Billie Eilish. La cantante estaba nominada a Mejor canción original por 'No time to die' y que finalmente acabó ganando. Para la ocasión apostó por el color negro, pero con un patrón llamativo abullonado y con volantes, algo muy en su estilo de la espectacularidad.